Trabajar para vivir o vivir para trabajar

A la fábrica! Es una obra desarrollada en el ámbito de la universidad pública por alumnes de la Universidad Nacional de las Artes. 29 actores y actrices en escena muestran su visión del trabajo, de la despersonalización de los trabajadores como gran masa humana utilizada como pistones de la maquinaria de producción, del esfuerzo por disfrutar el tiempo libre y la importancia de la lucha obrera en la ampliación de los derechos laborales en la Argentina.


¿Trabajar para vivir o vivir para trabajar? A las exhaustivas horas de trabajo propiamente dicho se le suman las horas de aseo para ir a trabajar, de comer para ir a trabajar, de dejar todo listo para el otro día y sobre todo de viajar para ir y volver del trabajo. El desgaste físico y mental de ir y volver caminando o en bici, el desperdicio de horas de esperar el transporte público (y depender de él aunque sea desastroso), viajar apretados, tratando de escuchar música o leer algo para hacerle creer a nuestro cerebro que no estamos ahí, para trasladarnos a otro lado como sea. Algo tan pequeño como olvidarte los auriculares te puede arruinar el día. La rutina incluye sacar la cuenta de cuánto tardás en vestirte y lavarte los dientes para negociarle un par de minutos más al despertador.

 

El elenco se presenta de forma individual, cuentan cómo son sus trabajados en call centers, shoppings, escuelas, hoteles, y finalizan diciendo “soy actor” o “soy actriz”. Resulta muy potente ver cómo tanta gente tiene que vivir la actuación como algo casi recreativo, tan apartado de su trabajo cotidiano. Al ver esa performance tan impecablemente cronometrada es imposible no pensar en el esfuerzo que les habrá representado lograr ese montaje, coordinando horarios entre tanta gente, llegando a un lugar específico de ensayo vaya uno a saber desde dónde, durante tanto tiempo.

 


La puesta en escena cuenta con un trabajo coral y coreográfico impecable. El vestuario bien uniforme de overoles, guardapolvos, todos iguales y sin que nadie se pueda destacar. Utilizan fragmentos de las películas y las canciones del cineasta Raymundo Gleyzer, secuestrado y desaparecido por un comando de la dictadura militar el 27 de mayo de 1976. En este contexto de propuestas partidarias basadas en el negacionismo y en la falsa teoría de los dos demonios, es reconfortante encontrar estas voces en el teatro, donde hay un público atento a lo que se pronuncie en el escenario.

 A la fábrica! Nos hace dar cuenta de que muchas veces naturalizamos situaciones muy alienantes en nuestro espacio laboral, como por ejemplo la falta de ventanas. Estar 9 horas encerrados en un lugar sin saber si afuera hace frío o calor, si llueve, si es de día o de noche. La falta de algo tan básico como una silla, por ejemplo en algunos stands en shoppings “porque no hay espacio”. El hecho de tener un speech que tenemos que repetir una infinidad de veces por día, tener que hacer cosas inescrupulosas y lidiar con el maltrato de clientes con la mejor cara posible para que no nos echen.


 Hay un gran trabajo con lengua de señas, supongo que además de ser un tema de accesibilidad es una forma de hacer alusión al resultado de la exposición al ruido ensordecedor de las sirenas de la fábrica, que sonaban varias veces al día para marcar el cambio de turno.

 Con el trabajo se compra el descanso. Siempre es absurda la relación entre el tiempo que destinamos a trabajar y el tiempo que nos queda libre para hacer otra cosa (donde generalmente hacemos uso del trabajo de alguien más, volviéndonos clientes/ pacientes/ alumnes/ espectadores). Parece ser una trampa, un callejón sin salida. El tiempo libre tan esperado es la zanahoria que perseguimos toda la semana y cuando llega se pasa tan rápido que cuando nos queremos acordar no sabemos ni para qué lo usamos. Sentimos la presión de usarlo bien, de disfrutar, de descansar y a la vez de hacer todo lo que no podemos hacer en horario laboral. El ocio queda cada vez más lejano e inalcanzable.

Les recomendamos estar atentos a las nuevas funciones de esta obra para poner en perspectiva el valor del resultado de la lucha y la sangre derramada, para no dar por sentados los derechos adquiridos y para no naturalizar el costo real de la vida laboral.


A La Fabrica! en Alternativa. Comunidad en escena. (alternativateatral.com)

A LA FÁBRICA! (O los trabajos y los días) (@alafabrica) • Fotos y videos de Instagram


Dramaturgia
:
Sergio Sabater

Actúan: Juan Pablo AgatielloJulieta Rocío BarlettaBautista BarreiroCamila CahnLara CastroNogaAgostina ColuccioFrancisco CottetLuz Belén DieguezCarolina ErsingerMilagros FerrariKatiuska FrancisJulián FuertesCarolina Galende KrummDaiana GonzalezLucila GrossiTatiana GurevichBelén IzaMacarena LauraJulieta MantarroAilu MaserMavi MassaSabrina Paz MasseriFederico MazzeoDaniela Yessica NuñoCamila PauloIván SardoAna Vergara

Diseño de luces: Leandra Rodríguez -Adea-

Edición de video: Sol AltareCarolina Ersinger

Operación de sonido: Sol Altare

Operación de video: Sol Altare

Asesoramiento Audiovisual: Violeta Sabater

Asistencia de dirección: Sol Altare

Colaboración artística: Omar "Chino" Kuhn

Dirección: Sergio Sabater

Prensa: 0KM Prensa

Nota y fotos: Joy Cantieri


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